"SENTIPENSEMOS"



El "sentipensar" (unir la razón y el corazón) de Eduardo Galeano debería trasladarse a la forma de hacer política. El corazón es algo que los políticos no deberían dejarse en casa a la hora de hacer política.
El progreso ha tendido a automatizar todo, hasta a las personas.
En atención al cliente de cualquier compañía a la que llamas para exponer una queja, solucionar un problema o resolver una duda, te contesta una máquina, te da varias opciones, te marea y te agota y ninguna te sirve. Si tienes la paciencia necesaria quizás llegues a hablar con un operador, alguien de carne y hueso, por fin.
Pero, ¿para qué todo el mareo anterior, desde cuando las máquinas entienden de emociones, si lo que necesitas es expresar tu enfado o insatisfacción con el producto, o que resuelvan tus dudas? Atención al cliente: si el cliente es una persona, ¿por qué no es atendido por otra persona? ¿No será acaso un maniobra de desgaste psicológico para que termines colgando el teléfono? Todo trabas a la hora de escucharnos, resolver las dudas o solucionar conflictos.



                         



Lo mismo pasa con el gobierno, cada vez más alejado de las personas, del pueblo, sus clientes, aquellos que compraron sus productos: programa electoral.
Yo no quiero un gobierno automatizado, que maree ante las quejas, y no escuche.

EDUARDO GALEANO:
-La razón cuando vive sola genera monstruos
-Es un mundo al revés que recompensa a sus arruinadores en lugar de castigarlos, ni un solo preso de los que provocaron esta crisis del planeta entero.
-¿Imaginan un mundo al revés, un mundo que castigue la honestidad y confunda valor y precio y se alimente de miedo? El valor no se mide por el precio, las cosas más valiosas suelen ser gratuitas.
- El sistema funciona patas arriba y no prioriza lo que de veras vale y que además nos entrena para el egoísmo y nos prohibe la solidaridad. de tal modo que nos cuesta mucho ver al otro, la otra, como una promesa y estamos casi obligados a ver al otro, la otra, como una amenaza.
- Este es un mundo hambriento de pan y abrazos y no seremos plenamente humanos ni seremos de veras democráticos, mientras no seamos capaces de construir un mundo sin hambre de pan y abrazos.

Dejemos de separar corazón y cerebro y construyamos entre todos un mundo más justo, más libre y más igualitario. Gobernemos junto a los políticos, que no gobiernen a pesar nuestro y de espaldas al pueblo. ¿Es posible esa democracia real en la qué el gobierno escuche al pueblo, pero no cada cuatro años? ¿Es posible gobernar desde la transparencia y no ser corrompido por el poder? ¿Es posible sustituir esa gran máquina de atención al cliente por personas?

Yo "sentipienso" que sí. ¿Qué "sentipiensas" tú?